Los
niñ@s creativos viven el mundo a través del dibujo y de sus pinturas.
Los adultos de cualquier edad también habitan las suyas.
Pueden sentir, mirar, reconocerse en su obra.
Son espejos simbólicos y reales de lo que esta vivo dentro de uno.
En arteterapia, durante el taller hay silencio, espacio, un máximo respecto.
El tiempo de la creación es personal y profundo.
Hay un acercarse al propio yo, al ritmo propio.
Cada persona con apertura y libertad va al encuentro de si misma.
En un ambiente calido se encuentra a gusto y resulta fácil pintar, liberar confusiones y alegrías.
Os acompaño , no hay ninguna necesidad de ''saber pintar- ni dibujar para crear y expresarte.